Aunque nuestro organismo, a través de órganos como los riñones o los pulmones, tiene la capacidad de equilibrar el nivel de pH dentro de nuestro cuerpo, los malos hábitos de vida, así como las dietas poco saludables o la contaminación, pueden acabar desequilibrando estos niveles y crear un ambiente más ácido en nuestro cuerpo, haciéndonos más vulnerables a las enfermedades e infecciones.
El agua alcalina nos ayuda a equilibrar el pH, producir más oxígeno y energía, así como a hidratar y prevenir el envejecimiento prematuro de las células. Tomando agua alcalina a diario contribuiremos a mantener nuestro organismo alcalino, algo que favorece a nuestro sistema inmunológico y reduce las posibilidades de sufrir enfermedades como el cáncer.
Si el ambiente en nuestro organismo se vuelve demasiado ácido o alcalino, las células sanas pueden dañarse, convertirse en células malignas o morir. Además, el ambiente ácido favorece la reproducción de las células cancerosas y su extensión a otras áreas del cuerpo (metástasis), siendo por tanto muy importante mantener un ambiente ligeramente alcalino en nuestro cuerpo para prevenir y combatir todo tipo de cáncer.
Por si fuera poco, el agua alcalina nos ayuda a mejorar la salud digestiva y densidad ósea, favorece la pérdida de peso saludable, nos llena de energía y vitalidad, es altamente hidratante y contribuye a eliminar las células malignas eficazmente, sin perjudicar a las sanas.
Agua alcalina para combatir el cáncer
Los cítricos son grandes alcalinizantes naturales, ya que el ácido cítrico se descompone en agua y dióxido de carbono, que pasa a la sangre y se mezcla con otras sustancias alcalinas en suspensión, como pueden ser el potasio, magnesio, sodio o calcio, formando carbonatos, que son sales muy alcalinas.
La sal del Himalaya, por su parte, destaca por su gran capacidad para eliminar metales pesados de nuestro organismo, como pueden ser el plomo o el arsénico, así como por su gran propiedad alcalinizante, ideal para reforzar nuestra salud y prevenir el cáncer.
Cómo preparar agua alcalina en casa
Preparar nuestra propia agua alcalina natural es tan sencillo como llenar una jarra con un litro de agua, agregar un limón lavado cortado en varios trozos (enteros, sin exprimirlos) y media cucharada de sal de Himalaya. Tapamos la jarra y dejamos reposar durante toda la noche. Por la mañana, nos bebemos dos vasos en ayunas.Remedio efectivo para prevenir y combatir el cáncer de forma natural. Pruébalo.
3 Comentarios