El ajo es una planta que se ha usado durante siglos para combatir todo tipo de problemas de salud debido a sus excelentes propiedades curativas y medicinales. Los antiguos romanos, por ejemplo, lo comían después de las batallas para recuperar energía y aumentar las defensas.
Incorporar un sólo ajo al día a nuestra dieta reportará grandes beneficios a nuestra salud, desde reforzamiento del sistema inmunológico hasta mejora del sistema digestivo.
Podemos tomarlo como más nos guste, crudo o cocido, untado en pan con aceite o como acompañamiento de otros platos (guisos, potajes, cocidos, etc). Para evitar el mal aliento lo partiremos por la mitad y le quitaremos su parte central. Nos cepillamos los dientes y listo.
Propiedades medicinales del ajo
Sistema cardiovascular
El ajo favorece la dilatación de los vasos sanguíneos, previniendo así problemas como las varices. También contribuye a reducir el colesterol malo en sangre, reforzando así el corazón y todo nuestro sistema cardiovascular.Antibiótico natural
El ajo es un gran aliado en la lucha contra gran cantidad de parásitos y bacterias, reforzando incluso la eficacia de ciertos medicamentos.Debido a su alto contenido en vitaminas, como la A, B y la C, el ajo nos ayuda también a prevenir los resfriados y enfermedades de las vías respiratorias, mejorar la salud y el aspecto de nuestra piel, así como a cuidar nuestra vista. Además, al ser un producto natural, carece de efectos secundarios, por lo que su uso es muy recomendado.
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