Roncar es la manera que tiene nuestro cuerpo de avisar que algo no marcha del todo bien en nuestras vías respiratorias, ya sea por problemas pasajeros como la congestión nasal que acompaña a un buen catarro, o problemas más graves como desviaciones de tabique o incluso sobrepeso.
No obstante es una "enfermedad" o síntoma, ya que realmente no se le puede considerar como tal, que quien verdaderamente lo sufre es la persona que duerme a nuestro lado, ya que el que ronca no suele saber que lo hace hasta que se lo dicen, por lo que tanto por la salud del que ronca como por la tranquilidad del acompañante, es importante tratar de acabar con los ronquidos cuanto antes.
Remedios caseros contra los ronquidos
Cebolla
Esta hortaliza rica en azufre es ideal para abrir nuestras vías respiratorias. Un remedio muy empleado desde hace décadas consiste en dejar una cebolla cortada por la mitad cerca de nuestra almohada cuando nos vayamos a dormir. La otra mitad podemos dejarla metida en agua y bebernos el líquido por la mañana. Notaremos una gran mejoría.Lavado nasal casero
Vertemos media cucharada de sal y otra media de bicarbonato en un vaso pequeño con agua y nos hacemos un enjuagado nasal. Esta opción es buena si tenemos algún tipo de dispensador o spray con el que ayudarnos a aplicarlo.Tiritas nasales
Esto no es un remedio casero en sí, pero da muy buenos resultados. Son unas tiritas que se sitúan en la zona media de la nariz y cuya función es abrirnos más las fosas nasales, contribuyendo de esta manera a mejorar nuestra respiración. Se venden en farmacias y/o grandes superficies.
Este artículo se ha creado a petición de uno de nuestros lectores habituales, que nos dejó su mensaje en el apartado "sugerencias" que podéis encontrar en la zona inferior derecha de la pantalla. ¡Espero os sea de gran ayuda a todos/as!
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