En la vida pocas cosas permanecen inalterables con el paso de los años: Nuestro pelo rubio o moreno se acaba convirtiendo en blanco; nuestra cara va perdiendo la piel tirante y ganando en arrugas; los edificios se van deteriorando y acaban siendo demolidos, etcétera. Esa ley natural está muy presente en todo, como en la ropa blanca que pasado un tiempo acaba por convertirse en un amarillo nada atractivo. Precisamente de eso vamos a hablar hoy en soluciones caseras.
Devolver el color blanco a un pantalón o camiseta puede parecer una tarea complicada, pero si sabemos cómo hacerlo, nos daremos cuenta de que es mucho más fácil de lo que parece. Existe una gran variedad de remedios caseros que nos pueden ayudar de manera efectiva a conseguir este "milagro". ¿Quieres conocerlos? Pues no dejes de leer...
- Remedios caseros -
- Agua y lejía: Muy importante atender a las proporciones, ya que la lejía en exceso puede acabar por amarillear aún más la prenda, además de "comerse" el tejido.
- En un cubo vertemos 5 litros de agua y una cucharada sopera de lejía. Removemos e introducimos la prenda por un periodo de unos 5 minutos. La frotamos bien, enjuagamos aún mejor y le damos otro lavado en la lavadora.
- Lavavajillas, detergente y agua: Otra alternativa a la lejía para prendas de algodón es hervir agua, una taza pequeña de detergente y un par de cucharadas soperas de lavavajillas. Cuando empiece a hervir, introducimos la prenda y lo dejamos hirviendo durante 3-4 minutos. Dejamos reposar durante otros 5-10 minutos, frotamos, enjuagamos y la ponemos a secar.
- Calcetines o prendas pequeñas: Ponemos a hervir agua y un limón cortado en rodajas. Cuando el agua comience a hervir, introducimos la prenda que queramos lavar (podemos moverla con ayuda de un utensilio de madera). Pasados 5 minutos, retiramos del fuego, frotamos, enjuagamos y a la lavadora.
Técnicas muy sencillas de realizar en casa y que realmente funcionan. ¡Anímate a probarlas!
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Devolver el color blanco a un pantalón o camiseta puede parecer una tarea complicada, pero si sabemos cómo hacerlo, nos daremos cuenta de que es mucho más fácil de lo que parece. Existe una gran variedad de remedios caseros que nos pueden ayudar de manera efectiva a conseguir este "milagro". ¿Quieres conocerlos? Pues no dejes de leer...
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- Agua y lejía: Muy importante atender a las proporciones, ya que la lejía en exceso puede acabar por amarillear aún más la prenda, además de "comerse" el tejido.
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- Lavavajillas, detergente y agua: Otra alternativa a la lejía para prendas de algodón es hervir agua, una taza pequeña de detergente y un par de cucharadas soperas de lavavajillas. Cuando empiece a hervir, introducimos la prenda y lo dejamos hirviendo durante 3-4 minutos. Dejamos reposar durante otros 5-10 minutos, frotamos, enjuagamos y la ponemos a secar.
- Calcetines o prendas pequeñas: Ponemos a hervir agua y un limón cortado en rodajas. Cuando el agua comience a hervir, introducimos la prenda que queramos lavar (podemos moverla con ayuda de un utensilio de madera). Pasados 5 minutos, retiramos del fuego, frotamos, enjuagamos y a la lavadora.
Técnicas muy sencillas de realizar en casa y que realmente funcionan. ¡Anímate a probarlas!
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