Tener mal aliento puede generar situaciones desagradables tanto para el que la padece como para la persona que se está comunicando con nosotros. Si bien este problema es difícil de detectar en algunas ocasiones -salvo que una persona cercana y con confianza nos lo diga-, muchas veces podemos detectar nosotros mismos la sensación: tener la boca seca es una de las señales más destacadas.
¿Por qué se produce? Como ya vimos en otro artículo sobre la halitosis, tiene un origen diverso -infecciones, restos de comidas...- aunque el más destacado es la presencia de placa bacteriana en nuestros dientes, lo que hace imprescindible el cepillado después de cada comida.
Si sigues los siguientes consejos, puedes ir despidiéndote del mal aliento.
- Cepillarnos muy bien los dientes después de cada comida. Podemos emplear pastas dentífricas mentoladas o con clorofila para fomentar esa frescura en nuestra boca. También es importante usar enjuague bucal al menos dos veces al día -mañana y noche-.
- Visitar periódicamente al dentista para que nos chequee los dientes. Sería muy recomendable también someternos a limpiezas bucales -que incluyen la eliminación de sarro- cada cierto tiempo. Con esto conseguiremos acabar con cualquier resto bacteriano que tengamos en nuestra dentadura.
- Evitar el consumo de ciertos alimentos como el ajo, la cebolla, los pepinillos y los muy picantes. También es importante evitar el consumo de productos lácteos por la noche, ya que éstos fermentan en nuestro cuerpo, provocando que tengamos mal aliento por la mañana. Igualmente reducir o anular el consumo de alcohol y tabaco, más aún en ayunas.
- Consumir alimentos que fomenten la secreción de saliva, como los cítricos o la manzana. Una buena opción es tomarlos como zumos/jugos durante la comida.
- Masticar chicles sin azúcar también nos ayudará a producir más saliva. ¡Pero sin abusar!
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¿Por qué se produce? Como ya vimos en otro artículo sobre la halitosis, tiene un origen diverso -infecciones, restos de comidas...- aunque el más destacado es la presencia de placa bacteriana en nuestros dientes, lo que hace imprescindible el cepillado después de cada comida.
Si sigues los siguientes consejos, puedes ir despidiéndote del mal aliento.
Cómo combatir la halitosis
- Visitar periódicamente al dentista para que nos chequee los dientes. Sería muy recomendable también someternos a limpiezas bucales -que incluyen la eliminación de sarro- cada cierto tiempo. Con esto conseguiremos acabar con cualquier resto bacteriano que tengamos en nuestra dentadura.
- Evitar el consumo de ciertos alimentos como el ajo, la cebolla, los pepinillos y los muy picantes. También es importante evitar el consumo de productos lácteos por la noche, ya que éstos fermentan en nuestro cuerpo, provocando que tengamos mal aliento por la mañana. Igualmente reducir o anular el consumo de alcohol y tabaco, más aún en ayunas.
- Consumir alimentos que fomenten la secreción de saliva, como los cítricos o la manzana. Una buena opción es tomarlos como zumos/jugos durante la comida.
- Masticar chicles sin azúcar también nos ayudará a producir más saliva. ¡Pero sin abusar!
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2 Comentarios
Gracias por compartir el remedio, lo pondremos en la página.