Las personas que trabajan con su voz, cantantes, vendedores, comerciales, profesores... así como los que no están acostumbrados a hablar demasiado y tienen que hacerlo un día concreto durante largo tiempo, pueden sufrir fácilmente de afonía. El caso es mucho más serio en el primer caso, personas que necesitan su voz para trabajar. Es por esto que la prevención es indispensable -aprender a hablar desde el estómago y no forzando las cuerdas vocales-. Sin embargo, también existen soluciones caseras para cuando ya estamos padeciéndola, como ya vimos por ejemplo, con la infusión de limón y tomillo. Hoy os traigo una nueva infusión, pero esta vez a base de cebolla.
- Preparación -
- Exprimimos un limón y lo echamos en un recipiente -un vaso mediano-. Posteriormente cortamos la cebolla en rodajas y la vertemos en el mismo recipiente, añadiendo agua hasta cubrir por completo la cebolla.
- Lo dejamos macerando toda la noche, y por la mañana, antes de tomarla, la filtramos y nos bebemos el líquido resultante. Lo ideal es beberlo con una pajita para que la ingesta sea más tranquila y se mantenga más tiempo el líquido en la boca aumentando su eficacia antibiótica.
¿Lo has probado ya? ¡Esperamos tus respuestas!
- Exprimimos un limón y lo echamos en un recipiente -un vaso mediano-. Posteriormente cortamos la cebolla en rodajas y la vertemos en el mismo recipiente, añadiendo agua hasta cubrir por completo la cebolla.
- Lo dejamos macerando toda la noche, y por la mañana, antes de tomarla, la filtramos y nos bebemos el líquido resultante. Lo ideal es beberlo con una pajita para que la ingesta sea más tranquila y se mantenga más tiempo el líquido en la boca aumentando su eficacia antibiótica.
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